Según un Informe elaborado por IMMUNE sobre el estado del Coding, durante los próximos años, los especialistas en IT, en concreto los programadores, serán uno de los perfiles profesionales más demandados, una demanda que se está viendo desatendida por los actuales sistemas educativos. Prueba de ello es que en España las titulaciones universitarias relacionadas con el sector IT suponen sólo un 1% del total.
Los principales objetivos de este informe son determinar cuáles son los perfiles profesionales más demandados en el sector IT en la actualidad y establecer los principales retos del modelo educativo. En este sentido, el estudio concluye que las nuevas metodologías a desarrollar deben combinar competencias en colaboración, creatividad, pensamiento crítico, comunicación e innovación.
El sector IT cuenta con una tasa de empleo del 76%
El sector IT en España tiene el segundo mejor ratio de empleabilidad con una tasa de empleo del 76%, sólo por detrás de los matemáticos y graduados en estadística (80%). Cifras que se acompañan por el crecimiento acelerado de la industria IT en todo el mundo. De hecho, según recoge el Informe IMMUNE, España es uno de los mercados TIC más importantes por volumen en Europa. Actualmente existen más de 33.000 empresas dentro del sector, con más de 471.000 trabajadores, y que tienen un valor de 105.868 millones de euros.
Uno de los perfiles que más ha crecido y evolucionado a lo largo de los años es el del programador, adaptándose a la aparición de nuevas tendencias tecnológicas. El nuevo profesional se caracteriza por combinar conocimiento técnico con habilidades sociales y de negociación, de forma que puedan atender a una gran variedad de funciones dentro de sus puestos de trabajo.
Estabilidad laboral y reconocimiento salarial son dos prácticas muy extendidas en el sector IT y de las que disfrutan los desarrolladores profesionales. Según recoge el Informe IMMUNE el factor más determinante para establecer el nivel salarial son los lenguajes de programación utilizados, en este sentido, los programadores de F #, Ocaml, Clojure y Groovy son los que más cobran, con salarios medios superiores a los 70.000 dólares anuales.
Por otro lado, el nivel de experiencia no es un factor determinante, y aunque los sueldos son más altos a medida que aumenta la experiencia, los desarrolladores que usan lenguajes como Go, Clojure y F #, cobran más que los desarrolladores que usan lenguajes como PHP y Visual Basic 6, con los mismos años de experiencia.
El Informe destaca también que entre el 70% y el 80% de los desarrolladores son empleados a tiempo completo. Destaca que en general, alrededor de una cuarta parte de ellos afirman que querrían crear su propia empresa, una tendencia que despunta mucho más entre los menores de 25 años. No obstante, en Estados Unidos los desarrolladores muestran una menor preferencia por trabajar como consultores independientes o freelancers.
Retos formativos para apoyar el crecimiento del sector IT
La falta de un enfoque más innovador en los sistemas de enseñanza y el exiguo conocimiento por parte de las administraciones públicas e instituciones educativas de los perfiles profesionales y competencias demandados por la Industria IT, ha contribuido a que en muchos casos la fuerza de trabajo se cubra con perfiles autodidactas de sectores más tradicionales.
A esto hay que sumar que de la oferta formativa tradicional que existe actualmente en España, sólo el 1% pertenece a disciplinas relacionadas con las nuevas tecnologías. Además de esta evidente falta de oferta formativa, hay que destacar la baja penetración de los estudio relacionados con el sector IT entre los más jóvenes, que hace que en Europa haya un 30% menos de licenciados en disciplinas relacionadas en nuevas tecnologías, frente a los licenciados en ciencia sociales y empresariales, según el estudio llevado a cabo.
Por ello, entre las conclusiones recogidas en el informe se establece que el objetivo debería ser “generar una fuerza laboral flexible, compuesta por profesionales con una formación genérica y transversal que les aporte la versatilidad y capacidad de adaptación a las necesidades del mercado y a sus fluctuaciones, y favorezca el trasvase y el reciclaje de un ámbito a otro”.
