La revolución tecnológica en su imparable marcha exponencial, está obligando a empresas y profesionales a afrontar un salto evolutivo nunca antes visto como el que ahora abordan, en el que la diferencia entre quienes están preparados, y deciden fluir con el cambio, y quienes aún se resisten, y acaban siendo empujados hacia una nueva forma de entender el trabajo, marca la diferencia entre el éxito y la mera supervivencia… o extinción. Hoy en día quien no cambia no solo se estanca, sino que desaparece.
Para cumplir este reto del siglo XXI la flexibilidad es el camino, y con ello nace una nueva raza de profesionales: los Knowmads. Su origen está en un juego de palabras en inglés entre el verbo know (saber) y nomads (nómadas), por lo que su traducción al castellano sería algo como “nómadas del conocimiento”. Definido por Moravec, sociólogo norteamericano fundador de Education Futures LLC y padre del término knowmad, como una persona creativa, innovadora e imaginativa, que puede trabajar con cualquiera en cualquier sitio. Es un concepto que adquiere gran relevancia en la época actual de cambio constante, de transformación digital y necesidad de adaptación rápida al entorno.
En un mundo de cambio acelerado propiciado por las nuevas tecnologías, estos perfiles con gran capacidad de adaptación son los que tendrán más oportunidades desde el punto de vista laboral.
¿QUÉ ES KNOWMAD?
Como deja entrever el propio nombre, son un tipo de trabajadores que no se ajustan al modelo inspiracional tradicional de conseguir un trabajo indefinido y pasar casi toda su vida laboral dentro de su empresa.
Los Knowmads aplican sus conocimientos al contexto que sea necesario para dar soluciones a problemas de distinta índole, en proyectos diversos e incluso en campos diferentes, son individuos que serán contratados específicamente para un proyecto por sus capacidades únicas para aportar su conocimiento y su experiencia a la consecución de un objetivo concreto. Una vez este objetivo se alcance, lo natural es que cambie de trabajo, mudándose a otro proyecto con características similares y en un estado parecido al que estaba el proyecto la empresa que lo contrató en primer término. Se manejan mejor en estructuras no jerárquicas y no tienen miedo al fallo.
Ser un nómada del conocimiento no está cerrado a un grupo ni a una edad determinada. Los knowmads aprovechan todos sus conocimientos y los aplican contextualmente a distintas situaciones laborales, aportando siempre valor y soluciones. Tienen además una motivación especial por la colaboración y el trabajo en equipo, y por supuesto dominan y emplean las nuevas tecnologías con soltura.
El Knowmad no son tanto un perfil laboral como una mentalidad, y todos tenemos la capacidad de adquirir esa mentalidad, por tanto es un gran gestor de la incertidumbre que usa su conocimiento, versatilidad y flexibilidad para buscar soluciones experimentales a problemas que a día de hoy no sabe cuáles serán.
ACTITUD KNOWMAD
Ser un ‘knowmad’ no es una cuestión edad, no habla de una generación concreta. Este tipo de individuos está en una constante búsqueda de información y aprendizaje para aplicarlo, y es consciente del valor de liberar el acceso al conocimiento. Pero también es capaz de desaprender rápidamente, para adherirse a nuevos paradigmas, sumando nuevas ideas. Su proceso de aprendizaje es permanente y para toda la vida, tanto por vías formales e informales.
- Ser creativo e innovador: No tiene edad y son unas capacidades que todos tenemos, pero que en muchas ocasiones están “dormidas”. Aplicar la creatividad e innovación para dar soluciones a problemas en la empresa aporta un gran valor añadido al knowmad.
- Aprender de los mejores: Fomento de la curiosidad, la sociabilidad virtual, abrazando los desafíos, no teniendo miedo al fracaso ni a pedir consejo a personas que pueden ampliar nuestro foco y ayudarnos a resolver situaciones complejas y entendiendo que lo que haces tiene más carga de reto que de obligación laboral. Siempre habrá alguien que se haya visto en una situación similar a la que tenemos que resolver.
- Desarrollar la marca personal: La digitalización permite que nuestros perfiles en redes sociales, si están bien desarrollados, trabajen por nosotros 24 horas al día y aumenten nuestra visibilidad.
- Hacer equipo: Es importante estar abierto tanto a compartir como a recibir nuevos conocimientos, y sobre todo establecer relaciones laborales con personas que nos complementen.
- Ser adaptable: Es el momento de activar el estado de beta permanente y mantener un aprendizaje continuo. De coger las riendas de nuestro futuro profesional. De ser autogestores. De (y aquí sí podemos aprender de los knowmads más jóvenes) conectar nuestro propósito interior con el trabajo que realizamos, para ser felices disfrutando del camino, ahora. Ese es el verdadero secreto de la adaptación al entorno digital.
En resumen… personas creativas, extrovertidas, imaginativas, innovadoras, independientes, colaborativas y autodidactas. Los knowmads son el futuro y ya casi presente del empleo. Las cifras arrojan que para el 2020 el 45% de la fuerza laboral va a ser nómada y es interesante estar preparados para no quedarnos fuera”.
Rafa Cuadrado