El informe “Descifrando el código de la criptomoneda”, de la sexta edición anual de la Encuesta Internacional sobre Banca Móvil de ING revela que el uso de criptomonedas podría duplicarse en un futuro. Cabe señalar que el 67% de los usuarios encuestados comparte que ha oído hablar de las monedas digitales, aunque tan sólo el 10% posee algún criptoactivos actualmente.
En cuanto al futuro, casi un tercio de los encuestados (el 32%) señala que comprará criptomonedas, mientras que el 23% asegura que no invertirá en este tipo de criptoactivos. El 33% de los usuarios que tienen intenciones de adquirir monedas digitales piensa pedir información a su asesor bancario y, por su parte, el 22% en sitios webs especializados. El creciente número de inversores en España convierten al país en uno de los primeros tres de Europa, junto con Turquía y Rumania.
Respecto al uso de las criptomonedas, un 41% de los españoles piensa que el valor de las mismas se incrementará durante el siguiente año y un 38% cree que son “el futuro de los gastos online y la inversión”, posicionándose así España en la media europea, que está situada en el 35%.
En lo que se refiere a las compras habituales, el 49% de los europeos no desea cambiar la forma de pago que utiliza en la actualidad. En el otro extremo, el 30% de los que sí que están abiertos a cambios, están dispuestos a utilizar criptomonedas para pagos internacionales online, el 26% compraría con monedas digitales un billete de avión y, el 21% de ellos pagaría impuestos o facturas con criptomonedas. Los más atrevidos están dispuestos a recibir su salario en criptomonedas (15%).
A pesar de que la inversión en criptomonedas este percibida como más arriesgada que las inversiones en otros activos financieros por casi la mitad de los encuestados, en concreto, por el 46%, el número de inversores en criptomonedas está aumentando de forma considerable, ya que los beneficios de su uso son múltiples.